De qué se trata...
"Estoy en un desierto y la palidez es el aura de mi encuentro. El sol brilla como el rey que es, no puedo describirlo, ni siquiera es válido que lo diga..."
he vuelto y vuelo
Correr es movimiento y decirlo es una estupidez, pero tuve ganas de cometer una entre tantas, a modo de regreso en este sitio que tenía olvidado. Ya está, he vuelto y vuelo.
días de rocanrrol
No jugábamos a ser Beatles o Rolling Stone, pero nos gustaba la magia de la música que surgía rebelde, queriendo romper los moldes de los 60'. Este dibujo es la imagen que tengo de un dúo de folk rock de nuestra ciudad, cuando una tardecita los vi llegar caminando hasta Juanita's Home, donde ellos tocaban y nosotros tuvimos el debut poco tiempo después. El portal aún existe y los muchachos también, todavía duros para la parca, que dios nos acompañe y podamos seguir cantando. (Texto y dibujo de José López Romero, serie "Bandas locales")
entre la gente
Rostros de amigos, seres entrañables unos, distantes por su vuelo otros, pero nunca lindantes en el abismo del olvido. Todos nos merecemos el abrazo del recuerdo y un "hola, como te va", si nos cruzamos por ahí, porque la tierra que nos parió une cuando nos sentimos propios, o despide cuando en nuestra irreverente idiotez cortamos el hilo de coraje humano que nos contiene. (Dibujos y texto de José López Romero)
gloria
Gloria mi vecina de más de 90 años, recuerdo de la infancia, amiga de mi madre María, esposa del obrajero de Villa Guillermina, la madre de Dante el acordeonista, de Mirta que trabajó en un circo y de Mary que era rubia y bonita. En la escuela escribía en una pizarrita con tiza cuando a los chicos no les daban cuadernos, su aula única hace mucho tiempo que no tiene techo y su entrada está custodiada por un árbol que quiso ser portero. Pero ya no había alumnos ni campana en el patio, ni maestra o directora, y Gloria viejita después de tanta soledad se marchó a juntarse con su "Pancho" en el cielo. Que Dios lo permita (José López Romero)
el dulce de la tierra
La tierra brotando con la insistencia del hombre y la indulgencia del clima. El zafrero cargando sus manojos de caña en los carros que irán rumbo al ingenio para transformarse en azúcar. Dulzura que muchas veces fue brote amargo en el corazón de los peones olvidados después de las cosechas. Las historias nobles de estos hombres están en los zurcos del norte para ser hallados.
danzando en colores
La luz entró por la ventana como si fuera un reflejo alado.
Yo, el del espíritu nómada, quedé sujeto a su rastro blanco que no me atrevía a ensuciar de pintura, como suelo contar con exagerada confianza de la realidad.
Sé que no estaba solo y las burbujas cayeron mansas, diciéndome desde su transparente silencio que es lo mismo un deseo entre la multitud, que un grito en la soledad. (José López Romero)
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